Entonces, ese nuevo arnés de coche para perros llegó justo a tiempo, ¿eh? ¿La noche antes de emprender un gran viaje por carretera?

UH oh.

Apuesto a que anticipaba sentir menos estrés en el automóvil porque está tan concentrado en el hecho de que su perro ahora estará más seguro. Por desgracia, es posible que descubra que este es el viaje más desastroso de todos los tiempos porque su niño salvaje aullador se agita angustiado.

UPS. Resulta que el momento ideal para conseguir cualquier nuevo equipo de retención de automóviles es un mes antes del viaje, no la noche anterior.

Cuando lo piensas, es obvio que no hay razón para suponer que tu perro será un perro perfecto si de repente lo atan a un nuevo dispositivo que restringe sus movimientos y se siente un poco incómodo. Seguro, tal vez tu pequeño genio lo entienda cuando le digas: “¡Cariño, esto es para protegerte! ¡Es porque te amo! » e inmediatamente relájese en el resplandor de esa idea. Sin embargo, es más probable. . . estará confundida acerca de lo que está sucediendo, lo odiará y hará saber su disgusto de una manera que posiblemente incluso te hará sentir menos seguro mientras conduces!

Entonces. Construya en algún tiempo. La clave para ganar la aceptación de su perro es llevarlo al ritmo de su perro y endulzar el trato combinando el nuevo plan de contención con algo que le encanta al perro, probablemente en la categoría comestible. A continuación, le indicamos cómo hacer que su perro use un arnés de automóvil:

• Empiece con un olfateo en su casa. Sea cual sea el dispositivo que estés usando, comienza a acostumbrar a tu cachorro a la idea de usarlo en tu hogar. Tal vez eso signifique que mientras miras la televisión, traes ese arnés o caja nueva. Hay un olfateo y una golosina. Repetir. Repetir. Crea un vínculo positivo.
• Ahora agregue restricción, aún en su hogar. Una vez que el cachorro esté contento con la vista / el olor del nuevo dispositivo, vaya un paso más allá: siga adelante y coloque ese arnés: ¡es hora de comer queso! ¡jamón! – y luego quíteselo. Repetir. Repetir. Continúe hasta que el perro mire ese arnés, mentalmente dispuesto para comenzar ese divertido juego nuevo poniéndolo.
• Construir en duración. Una vez que su perro esté tranquilo acerca de ponerse el arnés, haga que esa sensación dure un poco más. Déjala caminar con el arnés y dale un palo de matón para que disfrute al mismo tiempo. Repite algunas noches seguidas.
• ¡Golpea el camino de entrada! Si el cachorro se siente completamente cómodo con el nuevo equipo, es hora de probarlo en el camino de entrada. Cargue con, digamos, pescado seco o pavo, y lleve al cachorro al automóvil. Pon ese arnés, ¡golosina! – y luego quítatelo. Repetir. Repetir. Es todo por hoy. Luego, hazlo todo de nuevo al día siguiente.
• Prueba un viaje súper corto con un gran final. Ahora el cachorro está feliz de subir al auto y meterse en ese arnés o esa caja, es hora de dar un paseo. Escenario ideal: tres minutos en coche hasta la casa de la mejor amiga de tu perro. Cualquier breve momento de preocupación en el nuevo equipo es recompensado rápidamente con la mejor recompensa de la vida real en el arsenal: una divertida cita para jugar. Repetir. Repetir.

Ahí tienes. Su cachorro ahora tiene asociaciones felices de conducir mientras está restringido en el automóvil. No se apresuró a hacerlo y creó una asociación negativa con ese equipo nuevo. En cambio, debido a que invirtió el tiempo, esas cosas nuevas indican deliciosas golosinas y aventuras. ¡Estás listo para salir a la carretera!

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