La inflamación del colon o recto en gatos es una enfermedad que afecta a los intestinos. En resumen, la condición hace que el colon de un gato se inflame y puede causar úlceras.
En consecuencia, el colon de un gato no puede almacenar adecuadamente su caca y absorber suficiente agua.
Técnicamente, la condición también se llama colitis y proctitis.
Si ve signos de inflamación del colon o del recto en su gato, consulte a un veterinario para obtener un diagnóstico y tratamiento adecuados.
Esto es lo que debe saber sobre los síntomas, las causas y los tratamientos para la afección.
Contenido
Síntomas de inflamación del colon o recto en gatos
La condición produce una serie de síntomas. Estos síntomas suelen empeorar progresivamente. Algunos de los síntomas más comunes incluyen:
- diarrea con sangre
- diarrea con moco
- Hacer caca con más frecuencia, pero con cacas más pequeñas.
- pérdida de apetito
- Esforzarse demasiado al hacer caca
- vómito
- Deshidración
- Perder peso
- ir al escondite
Causas de inflamación colónica o rectal en gatos
Técnicamente, hay una gran cantidad de causas para la condición. Algunas de las causas más comunes incluyen:
- Parásitos (como tenias)
- Enfermedad inflamatoria intestinal
- Infecciones (bacterianas y fúngicas)
- efecto secundario de los antibioticos
- alergias a los alimentos
- comer algo toxico
- Cambios en la dieta
- problemas del sistema inmunológico
Tratamientos para la inflamación del colon o recto en gatos
Primero, su veterinario le hará preguntas detalladas sobre el historial médico y los síntomas de su gato. En segundo lugar, su veterinario examinará el recto de su gato. Esto es para buscar cambios anormales. En tercer lugar, se realizarán análisis de sangre y orina.
Luego se recolectará una muestra de la caca de tu gatito. Esto mostrará cualquier bacteria o parásito.
En casos con síntomas severos, se recomendará una radiografía o una colonoscopia. Esto ayudará a aclarar la causa de la inflamación.
En última instancia, el tratamiento de la afección dependerá de la causa subyacente. Algunos de los tratamientos más comunes incluyen:
- Cirugía para extirpar cualquier tumor
- Cambios en la dieta (generalmente alta en proteínas)
- Fluidoterapia para ayudar con la deshidratación
Además, en la mayoría de los casos, se recomendarán medicamentos antiinflamatorios. Como siempre, es importante seguir las instrucciones de su veterinario con cualquier medicamento. Siga las pautas exactas de dosis y frecuencia.
Finalmente, proporcione a su gato un ambiente hogareño tranquilo y pacífico para que pueda recuperarse con éxito de la enfermedad.
¿Alguna vez has cuidado de un gato que sufría de esta condición? ¿Cómo ayudó tu veterinario a tu gatito a recuperarse? Háganos saber en la sección de comentarios.