Enfermedades de depósito lisosomal en perros: síntomas, causas y tratamientos

Las enfermedades de almacenamiento lisosomal en perros son causadas por la falta de ciertas enzimas. Posteriormente, la afección suele afectar al sistema nervioso.

Afortunadamente, la condición es muy rara, aunque lamentablemente es fatal.

Además, ciertas razas, incluidos los beagles, los pastores alemanes y los cairn terriers, están más predispuestos a padecer esta afección.

Técnicamente, la condición también se conoce como deficiencia de enzimas metabólicas en perros.

Si ve signos de la enfermedad en su perro, consulte a un veterinario para un diagnóstico y tratamiento adecuados.

Esto es lo que debe saber sobre los síntomas, las causas y los tratamientos para la afección.

Síntomas de las enfermedades de almacenamiento lisosomal en perros

La condición produce una variedad de síntomas. Por ejemplo, algunos de los síntomas más comunes incluyen:

  • ataxia
  • convulsión
  • Debilidad
  • temblores
  • Incoordinación
  • Ictericia
  • desmayo
  • Ansiedad
  • evitando el ejercicio
  • Problemas de la vista
  • Locura

Causas de los trastornos de almacenamiento lisosomal en perros

La causa de la afección suele ser genética. Esto significa que un perro heredará la condición cuando nazca.

Desafortunadamente, ciertas razas parecen sufrir la condición más de lo habitual. Por ejemplo, algunas de estas razas incluyen:

  • terrier de las tierras altas del oeste
  • Pastor alemán
  • beagle
  • perro garrapata azul
  • Braco alemán de pelo corto
  • setter ingles
  • perro de agua portugués
  • Terrier de mojón

Tratamientos para los trastornos de almacenamiento lisosomal en perros

Primero, su veterinario le preguntará acerca de los síntomas de su perro. En segundo lugar, su veterinario le preguntará sobre el historial médico completo de su perro. Esto incluirá problemas específicos de la raza.

En tercer lugar, se realizará un examen físico completo. Se realizarán análisis de sangre y orina. Además, las radiografías de tórax pueden ayudar a diagnosticar la afección, junto con las ecografías del abdomen. Además, se pueden usar biopsias de tejido para confirmar la afección.

Desafortunadamente, no existe una cura actual para la condición. El tratamiento se centrará en controlar el dolor de su perro. Por ejemplo, se puede utilizar la terapia de fluidos intravenosos. Además, su veterinario puede sugerir cambios en la dieta que pueden ayudar a su perro.

En general, es probable que el ejercicio de su perro deba ser limitado. Su veterinario puede ayudar a crear un plan seguro para las necesidades de su perro.

¿Alguna vez has cuidado a un perro que sufría de esta condición? ¿Cómo ayudó su veterinario a su perro a recuperarse? Háganos saber en la sección de comentarios.

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